¡La gastronomía del suroeste no sería lo mismo sin ella! Rey de las mesas festivas, de los delicados aperitivos y de las comidas familiares, el pato de granja es un complemento bienvenido en cada momento importante. Fruto de una estricta normativa y de una larga tradición, su cría hace las delicias de epicúreos y gourmets del Val de Garona. Y a ti ¿cómo te gusta?
El pato gordo: ¡una historia de calidad!
Engordado desde el principio de los tiempos a base de cereales, el pato del suroeste conoció la llegada de una extraña oreja en el siglo XVI. El pero ! Esta llegada marca el inicio de un largo romance agrícola hasta la aparición de las conservas en el siglo XIX. De este amor nacieron dos sabrosas especialidades: el foie gras y el confitado.
Gran poder que implica grandes responsabilidades, esta IGP va acompañada ahora de estrictas medidas para preservar al máximo el bienestar y el sabor de los patos.
Entre ellas :
- La reproducción dura al menos 81 días.
- Cursos al aire libre
- Acceso a edificios durante el período invernal.
- Una dieta basada en maíz elaborado en el suroeste, garantizado libre de OGM
Resumen 1: ¡Animales criados según las reglas del arte por productores apasionados y orgullosos de perpetuar las tradiciones de su infancia!
Resultado 2 : Un pato de granja con un aroma sutil y auténtico que se puede disfrutar en los cuatro rincones del Val de Garona. Y eso lo clava.
¡El pato en todas sus formas!
Es imposible no encontrar pato a tu gusto, ya que hay muchísimas posibilidades para degustarlo:
- Confitadas, desmenuzadas y tiernas : para acompañar verduras asadas (zanahorias, calabacines, apio), gratinado dauphinois, puré de calabaza o arroz con grasa de pato.
- En pechuga de pato, suave y crujiente : para acompañar con tradicionales setas porcini, puré de patatas casero, coliflor gratinada, judías verdes y champiñones o un toque de miel.
- En negrita, para una entrada : para acompañar el clásico pan de jengibre, cebolla confitada, chutney de mango o higos frescos.
- En aiguillettes de pato, para hacer las delicias de grandes y pequeños : para acompañar con croquetas de patata, puré de apio, vinagre de frambuesa o salsa de miel y limón
Chef, la receta!
¿Hace buen tiempo y el cielo está azul? Esta es la oportunidad de atreverse con un tabulé con fresas Marmande y menta. Algo para alegrar un picnic en el Laderas de Gascuña o en el borde de Canal de Garona. ¡En vuestras bandejas, listos, recortad!
pechugas de pato mexicanas
Temporada del año Printemps HABER
preparación: mn 15
Cocina mn 25
Para las personas de 2 HABER
Tengo necesidad de :
- 400 g de filetes de pato
- 500 g de judías rojas cocidas y escurridas
- 1 lata de 400g de tomates triturados
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 3 cucharaditas de comino molido
- 1 cucharadita de pimiento de Espelette
- 1 cucharada de aceite de oliva
- sel
- pimienta
Empiezo :
Paso 1: Pelar y picar el ajo y la cebolla.
Paso 2: Picar los filetes de pato en un robot de cocina.
Paso 3: Dorar la cebolla y el ajo en una sartén grande o cazuela con el aceite de oliva durante 1 minuto a fuego alto.
Paso 4: Agrega el pato y dora durante 3 minutos a fuego alto, revolviendo.
Paso 5: Agrega la pulpa de tomate y las especias. Continúe cocinando durante 3 minutos a fuego alto.
Paso 6: Poner el resto de ingredientes en la cazuela: agua, cubos. Reduzca el fuego, cubra y cocine a fuego lento durante 20 minutos, revolviendo ocasionalmente.
Paso 7: Atender !
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